El árbitro agredido en Aranda recibe el alta pero «tardará en recuperarse»

El árbitro agredido en Aranda de Duero ha sido dado de alta. Tras pasar cuatro días en el Hospital de Burgos (la mayor parte del tiempo en la UCI), el colegiado comienza su recuperación, que se prevé lenta, mientras espera el juicio contra su agresor, el padre de un jugador de la categoría cadete del Capiscol CF.

El suceso se producía el domingo 9 de marzo en los anexos del estadio Juan Carlos Higuero de Aranda de Duero. Tras un partido de fútbol entre los cadetes del Aranda Riber y el Capiscol CF, el padre de un jugador visitante siguió al árbitro al finalizar el encuentro para increparle por haber anulado un gol al equipo de su hijo, según los testigos.

El árbitro cayó al suelo, perdiendo la consciencia durante varios minutos, y sufrió daños en el cráneo, la mandíbula y el hombro. Tras lo ocurrido, el agresor era detenido e investigado por un delito de agresiones. Ante el suceso, el Ayuntamiento de Aranda de Duero comunicaba su intención de personarse como acusación particular contra el progenitor que agredió al árbitro.

El lunes 10 de marzo, el colegio donde trabaja la víctima, Fernán González, apoyaba en una concentración al conserje, que lleva más de 20 años ocupando el puesto en el centro escolar.

Días más tarde, este miércoles 12 de marzo se conocía la noticia de que el agresor del árbitro quedaba en libertad provisional sin fianza. Además, tiene la obligación de personarse en el Juzgado cada 15 días, no puede acercarse a la víctima y tampoco a los campos de fútbol donde juegue su hijo.

Por otra parte, el Comité de Competición y Disciplina Deportiva de la Federación de Castilla y León de Fútbol ha decidido imponer al Capiscol CF una sanción «ejemplar, justa y aquilatada»: el club descenderá de categoría, además de imponérsele una multa de 1.500 euros.

Por último, y respecto al árbitro agredido el pasado domingo en Aranda de Duero, el varón ha pasado cuatro días ingresado en el Hospital Universitario de Burgos, la mayor parte del tiempo en la Unidad de Cuidados Intensivos. Fuentes cercanas confirman que ha recibido el alta médica en el Hospital Universitario de Burgos, donde permanecía desde ese día.

Además, señalan que el colegiado no necesitará pasar por quirófano a pesar de sus lesiones, al menos de momento. Sin embargo, son realistas a la hora de señalar que la recuperación será lenta tras las heridas sufridas en cráneo, mandíbula y hombro.

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